Museo Histórico de la Sierra Gorda hacia la biocultura

  • Su nuevo director realiza un acto de memoria de su niñez y conversa sobre el horizonte del espacio.

 

Por Demian Chávez.

Jalpan de Serra, Qro. 28 de diciembre de 2021.- Miguel Angel Herrera Oceguera vuelve a recorrer los patios, los pasillos, la salas de exposición del Museo Histórico de la Sierra Gorda. Se vuelve a encontrar con su niñez y los recuerdos de su padre quien estuvo al frente del museo serrano en sus inicios. Miguel ahora está en la misma oficina pero en calidad de director del espacio cultural que es un detonante para la cultura no solamente de la sierra sino también de la huasteca, con una importante influencia en San Luis Potosí y Puebla.

Herrera comparte que “cuando mi padre entra aquí como director del museo se convirtió en la mitad de mi escuela. En esa época conocí a Jose Antonio Macgregor y mi padre siempre se encargó de recordármelo. Le decía -quiero ser como él y hacer lo que hace-”. Entre risas confiesa que le cayó la maldición y se volvió antropólogo, bongocero y gestor cultural.

Explica que “30 años después, ahora que vuelvo es como un dejavú, porque es el mismo sillón, es el mismo escritorio, las mismas sillas, la misma oficina, la misma bandera. Pareciera como si no hubiera pasado el tiempo”.

 

Pero el tiempo ha pasado por el museo. Herrera Oceguera precisa que en la actualidad el recinto tiene una museografía espectacular diseñada por Crisanto Frias a quien considera un “gran diseñador de espacios museísticos”. Y continúa; “el trabajo que hizo Junípero Cabrera es un trabajo impresionante. Este carácter regional que tiene el museo es muy importante destacar, porque es un espacio de influencia regional. No solamente es la Sierra Gorda queretana sino que influye en las huastecas de San Luis, Puebla e Hidalgo. Funcionando como el epicentro para generar encuentros, diálogos. Por ejemplo, el Encuentro Iberoamericano de Niños y Jóvenes Versadores y Trovadores”

Este último es un evento muy importante para Iberoamérica. En el se dan cita los formadores de los nuevos versadores, de las músicas tradicionales de Iberoamérica y que ha significado el impulso para que la tradición siga viva.

“Hace 30 años, me acuerdo que se comentaba que los huapangueros aquí en la sierra, eran puros viejos, no había jóvenes huapangueros y niños, menos. Hoy en día hay tríos por todos lados, y muchos de jóvenes que están tocando de una forma renovada el son huasteco. (Por lo tanto) el museo es una historia digna de escribirse y para estudiar cómo una estructura cultural puede generar en 30 años un impacto real, tangible, incluso cuantitativamente. Creo que es un espacio  muy importante para el estado de Querétaro de los pocos espacios que tiene la Secretaría de Cultura fuera del centro de la capital. En cuestión cultural, Querétaro es más allá del primer cuadro del centro histórico. El impacto que puede tener un centro cultural como este es un ejemplo claro de una política cultural con una visión a largo plazo y de descentralización de los servicios culturales”, describe Miguel Herrera.

Miguel Herrera recuerda los espacios y los camina de manera diferente. Su fascinación por los patios, especialmente por el de los alambiques. “Cuándo era niño y acompañaba a mi padre a la sierra, todavía me tocó ver cuando era cárcel. Pasaba enfrente de la puerta principal y veía al fondo esos patios que todavía tienen los barrotes originales. Están desgastados de donde la gente ponía las manos. Éstos patios me gustan mucho. Recuerdo ahí se llegaron a generar talleres y conferencias”.

 

La operación del Museo

En cuestión presupuestal -ya es fin de año, y no tenemos presupuesto- indicó su director. “Hay un plan anual 2022 que le tocó proponer al maestro Junípero y que contempla actividades de difusión” y por supuesto el infaltable encuentro iberoamericano de trovadores y versadores.

También se tiene contemplado el Festival Santiago de Jalpan, que es impulsado desde el museo pero es un evento comunitario, es decir, no pertenece al museo o a la secretaría de cultura, sino es un festival de la población.

El museo es un espacio de apropiación social muy importante, así lo dejó ver su nuevo director. “El museo tiene vida propia independientemente de quién puede estar al frente y eso es importante”.

El nuevo director encontró recursos humanos importantes, un personal muy comprometido y muy trabajador, según relata. “Dos de ellos entraron a trabajar con mi padre: Verónica Ledezma y Dario Ledezma. Personas que ya están por jubilarse. En el caso de Dario, su plaza es de custodio sin embargo, se convirtió en uno de los guías más importantes que hay en la sierra. Mi padre les decía -no van a estar de custodios en una silla. Tomen los libros que se vienen a presentar aquí y quiero que los lean-.

 

Darío Ledezma hace de todo. Guía, custodio y conservador. Foto: Demian Chávez.

 

Hoy Dario Ledezma es quien da recorridos guiados en el museo. Y le ha tocado recibir desde turistas hasta a personajes de la política como recientemente al embajador de España.

Herrera los describe como “un personal que entregadísimo que todos le entran a todo. En donde la secretaria no tiene empacho que cada final de un evento si es necesario barre o pinta; en donde el auxiliar administrativo lleva y trae a un grupo o pone el micrófono”. Reconoce la disposición del personal pero también admite que el anterior director logró imprimir compromiso y mística en ellos.

Verónica Ledezma. Incansable. Foto: Demian Chávez.

 

¿Qué hay que ajustarle al museo para que no pierda este horizonte de seguir generando comunidad?

  • Más que ajustar quizás matizar, por ejemplo al museo lo utilizan para muchas actividades cívicas porque no hay otro espacio que engalane este tipo de actividades, se volvió como un lugar obligado. Esto si bien le da vida al museo, desgasta el personal. Por lo tanto necesitamos el apoyo de más personal debido a que se genera mucha actividad con muchas con muy pocas personas y con pocos recursos. Podría correrse ese riesgo de que el personal se desgaste.

Un patronato para el museo

Dentro de la visión que tiene Miguel Herrera también tiene la perspectiva de incluir a la federación y a la iniciativa privada privada para apuntalar los proyectos.

En el caso de la federación explica que muchos de los fondos federales que había para festivales o actividades comunitarias han desaparecido. Ante esta ausencia de apoyos tiene una estrategia. “Me interesa hacer a mediano plazo, conformar legalmente un patronato o una asociación civil de los amigos del museo; que nos ayude cobijar y a procurar fondos. Los legisladores federales y estatales deberán de ser aliados del museo y que comprendan que el museo trasciende y es el epicentro cultural de la Sierra Gorda y le ha dado mucho a Querétaro y a México”.

 

El museo hacia la Biocultura

Miguel Angel Herrera tiene la visión de redirigir al museo al concepto de patrimonio biocultural. Y explica. “Es decir la cultura no como algo separado de la naturaleza ni la naturaleza algo contrario a la cultura. En esta región es muy palpable en la idea de trabajar cultura en la naturaleza. No solamente en términos de conservación, sino además el cómo el medio ambiente influye en la creación artística de una región. Y aquí es muy claro”.

La visión del museo a través de Miguel Angel también será ampliar la mirada a los jóvenes quienes les interese el muralismo, el arte urbano o a personas qué están haciendo audiovisuales. Al final propone un universo que enlaza la historia, la tradición a lo contemporáneo y lo cultural vinculado a la naturaleza.

Miguel Herrera confiesa que llegó a la dirección como una propuesta desde la secretaría de cultura y reconoce que es lo mejor que le pudo haber ocurrido.

 

 

About Demian Chavez

Demian Chávez. (Piscis. 1975) Catedrático, Fotoperiodista y (ex)Tablajero. Estudió Artes Visuales y Docencia del Arte. Ha sido corresponsal fotógrafo para agencias nacionales e internacionales. Profesor de la Facultad de Artes de la UAQ; y conferencista en diversos foros en el país y el extranjero. Su obra artística y documental se ha exhibido en Cuba, España, Chile, República Dominicana y Francia. También Sketcher en ciernes. Hasta hoy es director, editor, aguador y becario de Artes y Destinos. No entiende de fútbol pero si sabe cambiar un foco y una llanta de auto. Vea su trabajo en www.demianchavez.com