Ruido…
siempre habrá ruido…
y nuestra voz se escuchará fuerte y clara…
Por Fausto Gracia
Contar nuestras historias en primera persona, será siempre una manera de reconocernos, de escucharnos, de nombrarnos. En ese ejercicio de introspección, nuestras historias generan ecos que sin saberlo se escuchan en los espacios más recónditos, hacen sentido y se vuelven la metáfora de una memoria perdida. Las historias y las memorias de las personas disidentes sexuales, de los raros, los jotos, las marikas, las lenchas, las trans*, les no binaries, han sido apagadas a lo largo del tiempo, han sido objeto de burlas y sarcasmos, de parodias y ejemplos de perdición, siempre con un sesgo de culpa, de antinaturalidad, de monstruosidad.
Hoy más que nunca y lo menciono como un continuo, como un quehacer necesario en todos los tiempos, es importante reconocer nuestra presencia como parte de este juego de tensión-acción con la otredad, como esta manifestación que interpela una normalidad ficcionada y manipulada. En ese sentido, resistir desde nuestros espacios más cercanos, desde nuestras familias elegidas, desde hermandades que nos cuidan y nos acompañan, es un factor que debemos señalar como parte de esas contraconductas tan necesarias ante la vorágine de los discursos hegemónicos.
Como bien los sabemos, el contexto en la ciudad de Querétaro y en el Estado en general tiene fama de ser conservador, casi en la medida de sus gobernantes y los partidos que representan. Debemos reconocer que sin duda estamos en un estado que se niega a discutir temas que son imperativos y base de los derechos humanos de sus ciudadanos, esto representa no solo un retroceso en términos sociales sino también en el ámbito legal respecto a otras geografías y territorios. Pero ante estas negativas, también podemos observar acciones que contribuyen al diálogo, que ponen sobre la mesa las emergencias de ciertas poblaciones y sobre todo se visibilizan como parte de una sociedad heterogénea, multilingüe, irreductible en su diversidad.
Aunque a los más queretanos no les guste, la migración que desde hace ya varios años se experimenta en la ciudad, ha sido un caldo de cultivo para una serie de movimientos contraculturales, que se posicionan desde la creatividad y la imaginación como un espacio de reflexión y crítica ante estas realidades locales, en muchas ocasiones violentas y normalizadoras.
Entrando en materia y para no verborrear demasiado, la intención de esta columna en esta ocasión es hablarles un poco sobre la casa Ballroom House of Apocalipstick Capítulo Querétaro, a partir de una de sus principales voces y cuerpas Miranda Apoc. Sin duda y para la gente que tiene contacto con el ambiente marika en la ciudad, esta casa y sus integrantes han organizado una serie de eventos por toda la ciudad, ya sean en espacios institucionales, en lugares alternativos y autogestivos, en plazas y jardines, en bares y lugares de ambiente, todos ellos dando a conocer la cultura Ballroom. Estos movimientos actualmente representan una resistencia política en muchos sentidos. Es un momento en que estas monstruosidades, estas rarezas y joterias se reivindican y se reconocen en sí mismas con dignidad y en una posición de sujetxs que luchan. Una lucha por una dignidad a la cual tenemos derecho sin anteponer la moralidad y los prejuicios personales de nadie.
La invitación a Miranda para hacer esta entrevista responde a una admiración sincera por el trabajo que ha realizado, en miras también de un relevo generacional que desde otros recursos se hacen presentes como disidencias, si bien estos esfuerzos son colectivos, y todas sus hermanas son parte importantísima de todo lo sucedido hasta hoy, siempre es necesaria una chispa, una acción, una palabra de inspiración para que el fuego se avive e incendie todo. De igual forma, considero que recuperar nuestras historias, contarlas, escribirlas, difundirlas es de suma importancia. No necesitamos que otros las cuenten cuando podemos hacerlo en primera persona. Es por ello que me gustaría de manera breve introducir un poco a Miranda Apocalipstick
-Voguera, Princesa del Bajío y Hermana Mayor en el Capítulo Querétaro de la Internacional House of Apocalipstick.
– Bruja politeísta, sacerdotisa de afrodita.
– Musa de pintores, poetas, músicos, escritores y cineastas.
– Artista multidicisplinaria de todas las indisciplinas.
– Puto, jotita, maricona. TRANSformer de los Autobots, travesti radical.
– Una Vestida, pero bien vestida.
– Sex Simbol de tiempo completo y la fantasía del chacal de tu colonia.
– Dominatriz de Peña Nieto y el Cardenal Norberto Rivera.
– El motivo del insomnio de Elsa Méndez.
– El cuchicheo de tus tías y la suggar baby de tu papá.
– Persona insoportable, intolerable, aborrecida.
– Pero siempre esa chica que amas en secreto.
Aquí les dejamos el podcast de esta entrevista. La entrevista fue realizada a finales del 2021, pero por una serie de factores, algunos internos y otros externos no fue posible publicarla antes, pero sin duda, al escuchar una y otra vez el audio en los procesos de edición, es imposible dejar de reconocer la importancia que tienen las palabras de Miranda Apoc y por eso es que estamos muy felices de poder publicarla. Solo como una nota al pie de la página, los sonidos ambientales que se escuchan, se han convertido en parte de la entrevista, es decir, de alguna manera aunque no fue planeado así, metafóricamente nos trae esta analogía de todo el ruido, de todas las voces, las risas, las burlas, los golpes a los que nos enfrentamos en nuestra cotidianidad al no ser parte de esa normalidad castrante y universalista, pero al final hemos crecido nuestras voces y las hemos posicionado de tal forma que se escuchan fuertes y claras, siempre como una forma de accionar, de resistir, de hacernos presentes. Disfrútenla, comenten y conozcan más sobre el trabajo de estas artistas.
Fotografías: Mónica Garrido y Dan Martin Edición: Mario Norberto Fernández Damas
Instagram @cartmiranda @houseofapocalipstick
