Querétaro, Qro. 17 de mayo de 2022.- Después de más de dos años de gestión, una pandemia y mucho papeleo, al fin este 18 de mayo, en el noveno aniversario luctuoso del poeta, escritor, editor y gestor cultural queretano, José Luis Sierra, será inaugurado un busto conmemorativo en su honor en el andador Libertad y calle Pasteur. Josefina Arellano Chávez, viuda del poeta, comparte la travesía para lograr este homenaje.
En entrevista con Artes y Destinos, Josefina relata que la rectora de la Universidad autónoma de Querétaro (UAQ), Teresa García “ vio muy bien que se ofreciera a la ciudadanía una figura de inspiración, sobre todo para jóvenes, niñas y niños y que se reconociera a un académico de más de 30 años de labor en nuestra universidad y que además también fue difusor de la cultura queretana en muchos lugares del mundo con una obra (poética) interesante. Si hubiese vivido más, más producción literaria habría tenido”, aseguró.
El poeta está incluido en la biblioteca de escritores mexicanos y fue también Consejero Ciudadano del Instituto Electoral de Querétaro; con ello “contribuyó al fortalecimiento y crecimiento de la democracia”, indicó Arellano Chávez. También fue miembro fundador del Sindicato Único del Personal Académico de la UAQ, lo que le dio la oportunidad de realizar trabajo de desarrollo académico ligado a lo cultural “ya que dirigió la revista Superación Académica por muchísimos años”, aclaró.
Sierra Salcedo fue miembro de consejos editoriales, jurado de eventos de literatura y amigo cercano de grandes personalidades de la cultura; entre ellos escritores, músicos y artistas plásticos.
Desde ahí, “nuestra rectora aprueba que se haga un reconocimiento en combinación con la Secretaría de Cultura de Querétaro, entonces dirigida por Paulina Aguado, quien también estuvo de acuerdo con el proyecto y se habló con Socorro López Salas para realizar el trabajo escultórico”, indicó Josefina Arellano.
El busto del poeta
Socorro López Salas es parte del equipo docente de la Facultad de Bellas Artes (UAQ) y trabajó intensamente para lograr la expresión y características que José Luis tuvo en vida. De la pieza realizó varios bocetos y “la versión final la logramos cuando José María (hijo de poeta) fue al estudio de la maestra”.
En la placa montada sobre la columna se incluyó un fragmento del poema La decisión es tuya que, de acuerdo con la familia, invita a la sociedad a cantar como clarín y no ensimismarse en sus broncas, tristezas o angustias. “Tres líneas muy cortas, pero es algo para que se lleve el lector: reflexiones sobre quién es el personaje y qué hizo”.
Una vez que se tuvo el visto bueno del Instituto Nacional de Arqueología e Historia (INAH), la primera opción para colocar el busto fue Jardín Guerrero. Para Arellano Chávez, el Centro Histórico de Querétaro ha sido como el patio de su casa, y el lugar ideal donde se encontraba el otrora café El Naranjo, lugar donde el poeta se reunía con sus amigos escritores, pintores y músicos. “Ahí era donde José María jugaba con la patineta, convivía con los hijos de los otros artistas mientras tomaban el café. Pero el INAH nos hizo saber que la vocación de ese espacio público es histórico al estar dedicado a Vicente Guerrero y no era tan conveniente que se colocara ahí el busto del poeta”.
Una vez que la sugerencia fue buscar otro lugar, Josefina Arellano deambuló por las calles haciendo apuntes sobre cuáles podrían ser otras opciones para colocar la pieza escultórica.
INAH sugirió andador Libertad y tras tener el visto bueno de los vecinos, la aprobación fue inmediata. Entonces se propuso inaugurar el monumento en marzo, sin embargo, un evento no contemplado de la Secretaría de Turismo tomó por sorpresa a los organizadores y no se pudo realizar.
Será en el marco del noveno aniversario luctuoso del poeta Sierra Salcedo, este 18 de mayo, cuando por fin se de paso al evento protocolario.
Los costos de la elaboración del busto fueron repartidos proporcionalmente por la Universidad Autónoma de Querétaro y la Secretaría de Cultura del Estado. La placa fue sufragada por la Secretaría de Extensión y Cultura de la UAQ y la columna realizada de cantera endémica fue pagada por la Facultad de Bellas Artes. Los costos de instalación, el trabajo técnico y toda la gestión que implicó diseñar planos y renders, los sufragó la familia del poeta.
El evento de develación habría de llevarse acabo en el andador pero en materia de permisos “las gestiones son muy complicadas para que te dejen hacer un evento en la calle porque ahora las medidas de bioseguridad, que son justificadas, complican la situación. Pero ya no podemos aplazarlo. De tal manera que el protocolo se llevará acabo en el recinto universitario Aurelio Olvera Montaño –ubicado sobre el número 29 de la calle de Independencia– para después desplazarse al andador Libertad”, invitó Arellano. Además de las autoridades universitarias y de Josefina Arellano, estarán también presentes Dalia y José María, hijos del poeta, quienes leerán algunos de los poemas del autor.
José María Sierra Arellano, hijo menor del poeta, viajó desde la ciudad de Chicago, Estados Unidos –donde se desempeña como colaborador del área de asuntos comunitarios del Consulado General de México–, comparte que es muy importante que su padre no solamente sea parte de las letras mexicanas sino también “de la ciudad de la que ya era parte de manera intangible”.
Sierra Arellano explica que hablar del poeta también es hablar del padre; considera que hay un punto en donde coincidían ambas personalidades. “Creo que la parte en la que se juntaban ambos papeles era la inclusión de sus hijos en su vida artística. Por mucho que él tuviera su proceso creativo y su grupo de personas con las que discutía y trabajaba –recuerdo haber estado siempre ahí, en esas conversaciones en El Naranjo y en los programas de radio–, siempre había una conexión; era una persona que procuraba tener espacios a solas con sus hijos, siempre revestido de este halo poético”.
José Luis Sierra, el editor
El escritor José Luis Sierra ha sido publicado no solamente en México sino también en España, Chile, Panamá, Estados Unidos, Guatemala, Amberes, Cuba. En periódicos, revistas y libros, ya sea en solitario o en ediciones colectivas.
“Afortunadamente acudió a muchísimos eventos de carácter internacional del mundo latino y no latino, entonces tenía contacto con muchos espacios y parte de la gestión cultural que hacía era intercambio de publicaciones” , así lo comentó Arellano Chávez.
“Algo que le interesó muchísimo toda la vida fue apoyar a escritores jóvenes. Los escritores noveles eran de mucho interés. Seguramente porque batalló mucho para que se le incluyera en medios.
Y los años que estuvo en el departamento editorial de Gobierno del Estado realizó una de las colecciones más importantes de literatura en Querétaro, desempolvando autores e impulsando a otros que no habían tenido esa oportunidad.
En sus últimos años de vida, algo que le llenó de alegría, fueron las reuniones con los escritores jóvenes y no tan jóvenes; le dieron mucho colorido a su vida. Yo les agradeceré siempre la solidaridad, la compañía y la complicidad en las letras. Porque le hicieron muy amables sus últimos años”, señaló.
Durante la estancia en Valladolid, España, se trazaron los lazos suficientemente fuertes para que a través de la Asociación de Mexicanos en Castilla y León, ésta se fortaleciera y tuviera otra proyección una vez que Sierra y Arellano participaron activamente.
Estos lazos continúan dando frutos como los cosechados con la compañía teatral universitaria Cómicos de la Legua, que el año anterior montaron la obra de teatro Los niños de Morelia en Valladolid.
